Perfumes sin tóxicos: alternativas naturales a las fragancias tradicionales
En una sociedad cada vez más concienciada sobre el bienestar y el cuidado del medio ambiente, los perfumes sin tóxicos tienen una demanda creciente. En este post te explicamos todo lo que debes saber sobre este tipo de fragancias.
¿Qué son los perfumes sin tóxicos?
Perfumes sin tóxicos, perfumes naturales o perfumes ecológicos son tres denominaciones que a menudo se utilizan de forma indistinta para hacer referencia a aquellas fragancias hechas mayoritariamente con ingredientes naturales, sin sustancias químicas que sean potencialmente contaminantes o perjudiciales.
En concreto, para que un perfume pueda etiquetarse como natural debe estar formado por más de un 50% de aceites esenciales naturales. Si necesitas una referencia, en la mayoría de los perfumes del mercado, ese porcentaje oscila entre el 10 y el 20%.
Los ingredientes naturales son directamente extraídos de plantas, árboles, semillas, flores… Es decir, no se sintetizan en un laboratorio. Aunque los científicos avisan de que lo sintético no es necesariamente negativo, ya que muchas veces las moléculas que se sintetizan son moléculas que se encuentran en la naturaleza, con lo que la separación entre natural y sintético se diluye.
¿Qué diferencias hay entre una fragancia natural y otra no natural?
Los perfumes sintéticos son más fáciles de fabricar en cadena, y además gracias a sus ingredientes pueden tener mayor duración o una fragancia más intensa. Dos motivos de peso para la industria del perfume. Por ejemplo, como norma general los perfumes ecológicos o naturales tienen menos notas olfativas que los de producción industrial de las grandes firmas (los estudios estiman que un perfume natural puede tener unas 150 notas olfativas frente a las 2.000 que puede tener un perfume industrial).
Las posibilidades de combinación en estos casos, por tanto, son menores, lo que proporciona a estos productos y, en consecuencia, a quienes los usan, la exclusividad que se busca al escoger un aroma determinado para su día a día.
Sin embargo, al prescindir de sintéticos nocivos, los perfumes sin tóxicos respetan la piel del usuario, disminuyendo enormemente la probabilidad de reacciones adversas, y también suponen una gran aportación por ser respetuosos con el medioambiente. Al estar hechos en su mayor parte con sustancias naturales, se reduce en gran parte la proporción de gases emitidos a la capa de ozono, gases que son contaminantes tanto para el planeta como para el ser humano.
¿Qué tóxicos puede contener un perfume?
La elaboración de perfumes en la industria es un procedimiento complejo en el que se pueden utilizar numerosos componentes, algunos de ellos son sustancias químicas que pueden ser potencialmente peligrosas y tóxicas.
Entre los tóxicos más habituales en los perfumes industriales se encuentran los siguientes: Benzophenone-3, Oxybenzone, Ethylhexyl Methoxycinnamate, BHT o BHA. Lo mejor es que revises la etiqueta de tus perfumes para comprobar si incluyen algunos de estos ingredientes y en qué proporciones.
Mucha gente suele pensar que los perfumes de las firmas más reconocidas y prestigiosas del sector deben estar hechos con componentes puros y naturales, teniendo en cuenta su precio, a veces tan elevado.
No obstante, para entender el motivo por el que se establecen esas tarifas, habría que prestar atención a otros criterios, tales como la publicidad y marketing, un diseño sofisticado, un frasco cautivador o la imagen de un famoso que actúe como referencia o autor.
Los expertos recomiendan no caer en el alarmismo. Todos los productos de cosmética a la venta en España pasan por estrictos controles sanitarios para garantizar su seguridad. Además, la demanda del mercado así como la normativa legal se ha ido adaptando a los nuevos tiempos y ahora las marcas están priorizando la fabricación de perfumes naturales, de modo que los perfumes sin tóxicos ocupan una cuota creciente.
Perfumes naturales en Esenzzia
Esenzzia es una firma de perfumería prestigiosa en el sector de los perfumes de imitación por la oferta de fragancias de alta calidad, siempre empleando ingredientes totalmente inocuos; así, nuestros perfumes sin tóxicos han sido una de las claves de nuestro crecimiento constante durante los últimos años, en busca de un producto que garantizase la total tranquilidad para nuestros clientes.
Nuestros perfumes de imitación cuentan con un proceso de elaboración puro y natural, dando como resultado unos perfumes sin tóxicos a los que no se aplican grandes tarifas, ya que prescindimos de todos esos factores que disparan la factura en la alta perfumería.
Por ello, en los artículos de nuestro catálogo, huimos de los ingredientes considerados como potencialmente tóxicos, dado nuestro compromiso con la oferta de los productos más cuidados y de calidad para nuestros clientes.
En algunos casos, se incluyen sintéticos que se consideran adecuados para conseguir el mejor resultado, pero estos son siempre carentes de sustancias nocivas, de ahí que siempre nos encontramos ante perfumes sin tóxicos.